“Porque los ojos de Jehová contemplan toda la tierra, para mostrar su poder a favor de los que tienen corazón perfecto para con él” 2 Crónicas 16:9
Lo que Dios está buscando, lo que Él anhela encontrar, no son personas con mucha ambición por las riquezas o sabias o bonitas. Dios está buscando a personas que quieren tener una relación con Él de corazón a corazón.
Para contar con el poder de Dios no hay vuelta que dar, tenemos que abandonar nuestra manera de pensar, nuestra manera de actuar, y tener un corazón perfecto. Y para lograr esto necesitamos tener estas 3 condiciones.
Un corazón descolocado: Esto lo tiene uno cuando está genuinamente arrepentido, y entregado a Dios. En el Salmos 51:17 dice “Al corazón hecho pedazos tu no despreciarás, oh Dios!” Sin un corazón hecho pedazos, en el suelo, Dios no puede hacer mucho con nosotros.
Nehemías cuando escuchó que los muros de Jerusalén estaban deshechos y que el pueblo andaba disperso se puso a llorar y ayunar puesto que tenía un corazón descolocado, hecho pedazos. Esto movió la mano de Dios.
Un espíritu contrito y humillado: Dios ha establecido algo que él odia absolutamente, el orgullo. En Santiago 4:6 dice “Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes”. Esto significa que necesito renovar mi respeto hacia la santidad de Dios. Para lograr un espíritu contrito y humillado necesito someterme.
La clave para que el diablo huya de nosotros es primero someternos a Dios. Es decir, rendirse a Él y entonces Dios da las fuerzas para resistir al diablo y él huirá de nosotros.
Una fe radical: Nuestra fe tiene que ir acompañada por una actitud radical y poder decir «heme aquí, te seguiré a donde tú quieras que yo vaya». Jesús lo puso de esta manera en Lucas 9:23 “Si alguno de ustedes quiere ser mi seguidor, tiene que abandonar su propia manera de vivir, tomar su cruz cada día y seguirme”.
Esto significa tomar pasos concretos y visibles con riesgo y sacrificio para cumplir con la voluntad de Dios. Tener una fe radical implica que hay riesgos que tomar, precios que pagar y deseos que entregar.
CONCEPTO IMPORTANTE
Hay personas que son muy entregadas a Dios, orando, ayunando y humillándose, pero cuando se trata de actuar se retractan indicando que Dios se encargará del resto. Tener un corazón perfecto requiere de una fe radical.
El poder que Dios quiere darnos sobrepasa todo conocimiento. Jesús dijo que nosotros podríamos realizar inclusive cosas aún mayores de las que él hizo. Sin embargo, como toda promesa tiene una premisa así también el recibir poder de Dios la tiene. El poder de Dios solo se manifiesta en mi debilidad.
Si quieres ver la gloria de Dios en tu vida lo primero que tienes que hacer es deshacerte del orgullo, la soberbia, la autosuficiencia y rendirte a Dios. El corazón descolocado tiene recompensa ahora y en el más allá.
MOTIVO DE ORACIÓN
Señor Jesús hoy vengo delante de ti rindiéndome completamente ante ti. Mi deseo mayor es buscar tu santidad en mi vida. Por ello crea en mí, un corazón limpio y renueva un espíritu recto dentro de mí.